Luna en Capricornio


Luna sólo está a unos metros de él.
Elegante, distinguida, sobria, enloquece a Saturno, si él se atreviera ordenaría a sus anillos que custodiaran sus piernas, se camuflarían bajo su falda para contraerse sobre su pelvis hasta disciplinar su fría coraza.

¿Por qué no me sientes?

En el instante que Luna camina hacia él, Saturno mira e imagina su proyecto a través del cristal en una mañana de gélido invierno.
Siempre tan distante, lejano, intachable, duro. 

 ¿Por qué no te abres a mí?

Respira profundamente Luna y con pose estirada deja los informes sobre su mesa, luego, camina pausadamente hasta la puerta, reteniendo el tiempo, esperando un deseo que se cristaliza dolorosamente a cada paso.


Imagen: Philip Gladstone

No hay comentarios: